jueves, 15 de octubre de 2009

Estoy, estoy

Hola a todos. Sé que no aparezco como debiera pero mis ratos electrónicos han caísdo drásticamente las últimas semanas. Y a esto deberíamos sumarle que no tengo muchas ganas de escribir. En fin, esto va por épocas. Hay días que uno podría postear tres o cuatro veces y otras que uno necesita dos semanas para darle a la tecla.

Principalmente no he contado nada porque no hay nada que contar. Mi vida sigue estancada habitando en una plácida balsa de aceite. Esto tiene la parte positiva de la estabilidad y tranquilidad de una apacible vida. Sé qué voy a hacer en cada momento, cada día de la semana... y no oculto que me gusta. Detesto las improvisaciones o las arenas movedizas.
Pero creo que no es el estilo de vida de una persona de 28 años. Llevo la de una persona de 45. A mi edad se requieren emociones, alteraciones de la existencia y locuras.

Los mayores badenes de mi vida son que me he apuntado a francés, una de las cosas que tenía pendientes desde hace años. Saber inglés es necesario pero manejarse en una segunda lengua es ya necesario para abrirse opciones laborales. Aparte de que tiene un factor personal también. A ver cómo se me da, pero en este punto, tras tres horas de clase diré que tiene pinta de ser más difícil de lo que parecía.
TAmbién me he apuntado a una clase de padel a la semana. Más por un compromiso que porque me apeteciera pero espero sirva para corregir errores. La verdad es que ultimamente juego bastante, al menos una vez a la semana, cuando no dos o tres.
Y también me he apuntado con Pablo a teatro. Lejana afición que compartimos ambos desde los años del colegio. Reconozco que me nos rondaba la idea desde hace años pero nunca se había materializado. No niego que tras la primera reunión estoy más desencantado de lo que esperaba. Le daremos algo de tiempo.

Y el resto del tiempo lo dedicamos a jugar a fútbol un par de veces a la semana, preparar la media maratón y salir. No va mas!

Ahora contaré algo que soñé ayer. Me da miedo admitirlo pero mientras estaba en ese estado de vigilia consciente justo antes de despertarme soñé con esta canción (que Dios me perdone).



No me preguntéis porqué. Pero soñé con esta bazofia. Aunque me sirve como un fantástico pie para descubrir un terrible plagio respecto a una canción de Sabina (aunque por antigüedad ya sería imposible, a nadie le cabría en la cabeza que Xuacu fuera a plagiar a estos gañanes come Whoppers). Deberéis pasar el calvario de escuchar la primera pero a mi me parece harto-evidente que suenan iguales en algunos compases.



En fin, rompo la dinámica de ausencias de la última semana. Estoy, que no es poco.

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